El soldado murió golpeado.
Murió golpeado por el cabo
que lo tiró a puñetazos,
lo forzó a levantarse
y lo siguió golpeando.
Finalmente, el soldado cayó de bruces
y murió.
Detrás de la cerca
brillaron los ojos de unos niños
entre los cuales siguen brillando
los míos.
El soldado murió callado,
reprimiendo su cólera, su terror y su reclamo.
Cuántos soldados murieron así?l
Que no sea la muerte nada más que una pérdida;
que se llene el mundo con las almas
Yutaka Hosono
Antología Poesía contemporánea del Japón.
Tetsuo Nakagami/Yutaka Hosono
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